Escribe: Md Gustavo Silva Paredes
El día lunes 26 se cumplirán 13 días desde que se
inició la huelga médica, y el mensaje que más se repite en estos días es la
existencia de dos “bandos” aparentemente divergentes, sin objetivos en común que
se agreden constantemente y de varias formas en la prensa y en las redes sociales.
Independientemente de quien tenga la razón (sólo
para este análisis), se ignora que como resultado de este conflicto y mutuo ataque, la credibilidad hacia los profesionales médicos y hacia la institucionalidad del
país representada por los Ministerios de Salud y de Trabajo se ve disminuida y
menguada frente a la ciudadanía, efectos que son nocivos para mantener salud del país
y que tomará más tiempo reconstruirlos que el que ha tomado destruirlos.
La ciudadanía mientras tanto opina en base a los
adjetivos y versiones que ambos lados brindan, al no existir una plataforma
donde los ciudadanos pueda informarse directamente de todo lo referente a la huelga
médica, demandas, propuestas, contrapropuestas, informes, acuerdos u opiniones de cada negociación
o reunión que realizan los profesionales médicos y las instituciones estatales.
La Transparencia es un derecho ciudadano y es la mejor
forma en que la ciudadanía puede y debería participar en un proceso donde no sólo
se debate el sueldo de los profesionales médicos, se debate también el actual
proceso de la reforma de salud, reforma que afecta a los 30 millones de
peruanos.
La salud es primero, pero muchos de los funcionarios del gobierno a la cabeza de la ministra de salud Patricia Garcia no lo entienden, a la huelga médica se suman las de las enfermeras y de los obstetras, una papa caliente mas para PPK.
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